La meva llista de blogs

dimecres, 30 de novembre del 2022

SOY MALPENSADO, PERO...... A VECES ACIERTO.

Esquerra Republicana está vendiendo como un gran éxito fruto de la mesa de diálogo el cambio propuesto por el Gobierno sobre el delito de sedición. Parece que ahora se llamará delito de desórdenes públicos agravados. Dicen rebajar las penas impuestas y a partir de la nueva redacción los sentenciados podrán ser condenados a un máximo de 5 años de prisión y 8 de inhabilitación. El presidente Sánchez, la vicepresidenta Calviño y el portavoz socialista Patxi López coinciden y precisan que el nuevo delito favorecerá la extradición de Carles Puigdemont y de otros exiliados para que pasen cuentas ante los jueces españoles. Asimismo, ERC anuncia que está negociando con el Gobierno una modificación sobre el delito de malversación, tal y como antes había hecho con la negociación del indulto de los presos políticos, según reconocimiento explícito de Joan Tardà.

Es decir, la mesa de negociación está sirviendo para justificar ante el Mundo que los días 6-7 de septiembre (leyes de desconexión), 20 de septiembre (concentración ante la consejería de Economía) y 1 de octubre (día del referéndum) del año 2017, se produjeron unos hechos que nunca hemos reconocido como delictivos aunque por este motivo se ejecutó la destitución ilegítima del Gobierno de la Generalitat y la detención y enjuiciamiento de los consejeros que permanecieron en Cataluña, los cuales fueron condenados en un juicio farsa a decenas de años de prisión e inhabilitación. Y que al mismo tiempo provocó el exilio del presidente Carles Puigdemont y de otros consejeros que marcharon al extranjero, en calidad de exiliados políticos. Todo ello rematado con la disolución ilegal del Parlament y posterior convocatoria de elecciones, hechos que sólo podían ser tomados por el presidente legítimo de la Generalitat, el único legalmente habilitado para hacerlo.

Esto ocurrió como consecuencia de la aplicación retorcida del artículo 155 de la Sagrada Constitución Española, interpretada por políticos y jueces españoles sin principios ni ética, así como el más mínimo atisbo de ejercer verdadera Justicia ni mostrar humanidad de ningún tipo ... Fue la aplicación a la vez de la ley del embudo y del derecho de pernada, versiones 4.0.....

¿Por qué el Gobierno de Pere Aragonès, tutelado por Oriol Junqueras, acepta estas modificaciones de un Código Penal que ya ha sido manoseado antes por unos jueces inquisitoriales, que han impartido venganza en lugar de verdadera justicia?. ¿Creen que si fuera necesario no volverían a hacerlo, a pesar de todas las reformas actuales o futuras que se pudieran pactar y legislar?. ¿Por qué estas negociaciones de gobierno a gobierno, que debían centrarse en el derecho de autodeterminación y la amnistía, se han transformado en un intercambio de cromos -yo apoyo los presupuestos del estado y tú los de la Generalitat-?. ¿Por qué quieren que nos traguemos que todo esto se hace para favorecer la desjudialización de los imputados por ser independentistas, cuando la represión policial no se detiene ni en broma, ni la fiscal o judicial y que ya afecta a más de 3000 ciudadanos independentistas amenazados por estado de derecho español?.

Hay tantos porqués sin respuestas que nos impiden entender qué quiere y qué pretende el Gobierno de la Generalitat, riéndole las gracias a un Gobierno que a la mínima te levanta la camisa o te roba derechos y libertades.

Algunos dirán que lo hacen porque prefieren apoyar a un Gobierno español de izquierdas, antes de que las derechas extremas -PP, C's y VOX- lleguen a gobernar. Otros dirán que lo hacen para favorecer que Oriol Junqueras pueda presentarse en las próximas elecciones. Hay malpensados que creen que quieren adormecer el independentismo y resucitar el autonomismo, como si de una nueva ave Fénix se tratara. Incluso opinan que lo hacen para aniquilar políticamente a Carles Puigdemont, porque es el enemigo común a batir para ERC, el Gobierno, los jueces y todo el Estado y quieren que sea extraditado y condenado por la Santa Inquisición Española....

También hay bien pensantes que creen que ERC está haciendo lo correcto, por pragmatismo y para gobernar el día a día de los ciudadanos y de la nación, aunque eso no quiere decir que se olvide del objetivo de la independencia a pesar de que la posponga para más adelante. Incluso los hay que dan por bueno que haga como la antigua CiU de Roca y Duran, pactando todo con el Gobierno de Coalición más progresista de la historia, a cambio del pájaro en mano o de unas migajas políticas más aparentes que sustanciales.

Yo personalmente, que algunas veces también soy malpensado, creo que se trata de una mezcla de todas estas pensadas pero coronadas por una aún más grave, impropia de cualquier gobierno y particularmente el de la Generalitat: Son pardillos, incapaces de gobernar sensatamente y que no tienen en cuenta ni los deseos de la mayoría de catalanes ni la pesada historia de incumplimientos y violencia que arrastran los poderosos de España sobre sus hombros.

Y sobre los nuestros, ¡que siempre acabamos pagando los platos rotos!.



diumenge, 6 de novembre del 2022

IMAGINAROS.....

Desde mi último escrito han pasado muchas cosas. El gobierno Aragonés se ha resquebrajado, a mí me han operado del corazón y todo indica que ERC ha aparcado la independencia para más adelante, ad calendas graecas. Pero la vida continúa.

Últimamente confieso que he sido muy crítico con las políticas iniciadas por ERC. Quizá demasiado crítico. Pero Oriol Junqueras y Pere Aragonès me sacan de quicio. El presidente de la Generalitat primero rompió el pacto suscrito con las CUP, negándose a someterse a una cuestión de confianza, tal y como se había comprometido durante la investidura. Y después de que JUNTS denunciara el incumplimiento del pacto de investidura suscrito con ellos, ERC decidió acusar de desleal al vicepresidente Puigneró, de JUNTS, destituyéndole y no atendiendo las cuestiones planteadas por los socios de gobierno, negándose responder a las exigencias planteadas, en una actitud de prepotencia y soberbia inaceptables para cualquier partido que se precie.

 ERC ha creído que tener un escaño más que JUNTS le permite imponer sus políticas sin necesidad de negociar nada con los socios. Se han creído lo de la hegemonía independentista a pies juntillas. Y más escasa esta hegemonía republicana no puede ser. Un solo escaño y unos miles de votos más que JUNTS.

Sea como fuere, la realidad es que el gobierno independentista se ha roto. Y ahora ERC cree que puede hacer y deshacer lo que quiera con una amplia nueva mayoría progresista conformada por ERC, militantes históricos de Convergència, Podemos y el PSC. Es decir, prescindiendo de los independentistas de las CUP y de JUNTS. Dice que gobernará para la Catalunya entera y se entiende que habla de la Catalunya autonomista.

Excusas de mal pagador, eso es lo que está haciendo Pere Aragonés bajo el tutelaje de Oriol Junqueras. Están pagando religiosamente el precio del indulto a los presos políticos, según confirmó abiertamente Joan Tardà no hace demasiados días. Gabriel Rufián lo confirma día tras día pactando la gobernabilidad del gobierno de coalición más progresista de la historia de España a cambio de unas escasas migajas que no llegan ni mucho menos a parecerse al pájaro en mano de la antigua CiU de Roca y Duran.

ERC ha decidido enfriar la independencia y se esconde detrás de conceptos tales como amplios consensos, Cataluña entera o gobernar el día a día.

Cuando Oriol Junqueras y otros independentistas decidieron quedarse en España asumiendo que encontrarían justicia donde no la hay, empezó el descalabro independentista. Descalabro que se ha acentuado con el mantenimiento como líder del partido republicano a Oriol Junqueras. ¿Cómo puede cualquier líder actuar libremente, pactando con quien te encarcela, te condena y después te indulta a cambio de hacer bondad renunciando a todo aquello que te ha llevado a la cárcel?

Siempre me he declarado como antiguo votante de ERC. En estos momentos no volveré a serlo por una pura cuestión de coherencia y dignidad. Oriol Junqueras se equivocó entregándose a la justicia española y el precio lo estamos pagando todos los independentistas.

¿Os imagináis que hubiera pasado si en lugar de quedarse en España se hubiera marchado al exilio con el presidente Puigdemont?.

¡Yo si que me lo imagino!. Y me muerdo las uñas de rabia porque esto no pasó.....

dimecres, 24 d’agost del 2022

HIPERVENTILADOS E HIPOVENTILADOS......

A lo largo del proceso emprendido hacia la independencia de Cataluña, aquellos catalanes que la hemos defendido hemos sido insultados despiadadamente y catalogados como "procesistas", radicales, rebeldes, iluminados, revolucionarios, sediciosos, "lazis", "nazionalistas", ir con el lirio en la mano.... Toda una serie de calificativos y definiciones mayoritariamente ofensivas, insultantes o burlonas que podemos atribuir a la prensa afín al régimen, a periodistas cavernarios, a unionistas más o menos ardorosos e incluso a independentistas de poca monta, o aquellos situados en los extremos del movimiento independentista.

En estos momentos también se habla de unas nuevas especies de catalanes independentistas: Los hiperventilados y los que podríamos calificar como sus antónimos, los cuales me atrevo a calificar como hipoventilados.

Los hiperventilados son aquellos que defienden la confrontación con el estado. Se muestran partidarios a no negociar en ningún tipo de mesa con los que consideran son sus verdugos. ¡Quieren la república, ya!. Están dispuestos a combatir políticamente cualquier gobierno de Madrid y cualquier política que signifique marear la perdiz indefinidamente y consolidar, por tanto, el autonomismo por siempre jamás. Creen firmemente que España no es muy democrática y en cambio si excesivamente autoritaria -consideran que es un estado surgido de las entretelas del franquismo-. Un estado que hace trampas, que manipula, maestros de la trilería política y que nunca cumple los compromisos adquiridos. Los hiperventilados son políticamente radicales, tienen prisa en conseguir la independencia, carecen de paciencia y son extremistas que priorizan la independencia por encima de todo. En definitiva, políticamente están muy ventilados y no se están para romances.

En cambio, los hipoventilados son lo contrario. Rehuyen o no les gusta demasiado el viento de la libertad y prefieren estar más a resguardo. Quieren negociarlo todo aunque la otra parte no quiera negociar nada, que no sea el encaje definitivo de una Catalunya autonómica ligada para siempre al Reino de España. Piden ensanchar la base independentista con aquellos que no son independentistas y acaban ensanchando la base unionista. Piden la amnistía y se conforman con el indulto. Prefieren gestionar el día a día autonómico -el pájaro en mano pujolista-, aceptando y obedeciendo las normas y leyes impuestas por el estado. Rehuyen la confrontación política y compran punto por punto el mantra unionista de que no somos suficientes, no tenemos fuerza, hay que negociarlo todo, debemos apoyar los presupuestos del estado y el gobierno de coalición más progresista de la historia, porque si no lo hacemos será sustituido por un gobierno marcadamente conservador conformado por la derecha extrema, es decir el partido popular, apoyado por la extrema derecha, es decir VOX y los nacionalistas españolistas que queden de la morralla de C's.

Como puede verse las dos almas independentistas se hallan diametralmente enfrentadas a causa del camino que debe llevarnos a la ansiada independencia de Catalunya. Unos quieren ir en línea recta y otros quieren dar mil vueltas...

En medio de las dos ventilaciones nos encontramos quienes sencillamente queremos la independencia. Sin matices, sin prisas ni tampoco con pausas. Somos los que estamos dispuestos a culminar el mandato surgido de las urnas el 1 de Octubre de 2017 y que, ahora si, defenderemos la república enconadamente, con lo que haga falta, porque tanto los híper como los hipo y los normalmente ventilados así lo queremos, la deseamos y la conseguiremos, sin aspavientos ni temores de ningún tipo. Los ventilados no creemos en la bonhomía de un estado que nunca nos ha sido favorable ni leal. Sabemos que no van a renunciar a la persecución política, ni judicial, ni policial contra los ciudadanos catalanes que queremos la independencia. Que España nunca reconocerá a un ciudadano catalanohablante los mismos derechos que a un castellanohablante y por tanto nunca dejarán de intentar aniquilar la cultura y lengua catalanas. Que nunca reconocerán el enorme esfuerzo financiero que hacemos todos los catalanes llenando con nuestros impuestos las arcas de un estado que nos devuelve escasas migajas y nos empobrece como pueblo año tras año en aras de una falsa solidaridad interterritorial. Creemos que nunca permitirán que las diferencias políticas entre ambas naciones se sometan al resultado de un referéndum y mucho menos si es de autodeterminación. Que la única negociación que debe hacerse con un estado como el español es cómo y cuánto se convoca el referéndum y la distribución de activos y pasivos estatales entre las dos naciones. Y si no lo permiten ni quieren negociar, sabemos que la única alternativa es la DUI. Si bien las dudas sobre cómo encajarán un resultado favorable a la independencia de la gallina del huevo de oro -¡la última colonia del imperio español!- no se desvanecen, vistos los ejemplos de violencia y debilidad democrática que recoge la historia España. Sin embargo, todos queremos la independencia.

Los hipoventilados corren el riesgo de ahogarse por falta de aire. En cambio, los hiperventilados podrán ser arrastrados por los vientos de libertad y auténtica Justicia que soplan persistentemente dentro del independentismo. Los ventilados, sin miedos, sin hipotecas partidistas, ni sectarismos, ni condicionamientos castradores, somos los que ganaremos la independencia de Catalunya.

La conseguiremos tranquilamente. Más temprano que tarde..... ¡El tiempo lo dirá y confirmará!.

¡Así será!.






divendres, 22 de juliol del 2022

SUBJETIVIDADES Y PERCEPCIONES.

La actualidad dentro de mundo independentista se encuentra plagada de una serie de sensaciones contradictorias. Hay decepción, resignación, indignación, optimismo, pesimismo, fatalismo, realismo, ilusión, esperanza, pragmatismo, impaciencia.... ¡Hay todo esto y más!.

Ciertamente cada sujeto y objeto independentista desatan un montón de contradicciones. Así, algunos políticos provocan aplausos, adhesiones, indignación o decepción a la vez, dependiendo de si estás a favor o contra su posicionamiento político. Lo mismo ocurre con los partidos y entidades soberanistas. Hay críticas y alabanzas por todo y para todo el mundo. Incluso los insultos sobrevuelan de un lado a otro con una facilidad inverosímil.

Sin embargo, no se puede decir que el objetivo final de conseguir la independencia de Catalunya haya retrocedido o empequeñecido lo más mínimo. Sencillamente lo que ocurre es que para unos sigue siendo prioritaria a pesar de la oposición represiva y violenta del Estado y para otros lo prioritario es conseguirlo hablando y pactando con España. Unos quieren, lisa y llanamente, el enfrentamiento político y administrativo contra un estado que consideran fallido y otros rehuyen el enfrentamiento apostando por el acercamiento y el diálogo por más decepcionante que resulte, pecando incluso de un exceso de ingenuidad naif. Por esto están dispuestos a mostrar toda la tibieza que haga falta, para no estropear el entendimiento con el PSOE y Comunes, considerando que son la auténtica izquierda y obviando que se trata de la singular izquierda española. Y así, apoyan presupuestos, votan leyes a favor del gobierno y aceptan hablar con quien ha dicho por activa y por pasiva que nunca aceptará el derecho de autodeterminación de Catalunya ni la amnistía de los presos, exiliados y represaliados políticos catalanes que, por cierto, suman ya más de 4.200 ciudadanos catalanes según OMNIUM, policial y judicialmente perseguidos por la santa inquisición española.

Yo también tengo mis percepciones sobre todos los protagonistas y acciones desarrolladas en el drama soberanista catalán. A sabiendas que son subjetivas, personales y sin duda cuestionables o incluso criticables. Pero estoy seguro de que también son compartidas por muchos compatriotas. Así que...

Percibo que ni Junts, ni ERC, ni las CUP, ni ninguna institución independentista tienen claro el camino que debemos seguir para conseguir la independencia. No hay una hoja de ruta compartida, como si había antes y durante el 1O de 2017. También percibo que algunos presos políticos después de la dura condena sufrida y del humillante indulto -por cierto, ahora en revisión en el TS- que graciosamente otorgó su Majestad, no quieren volver a sufrir más y quieren ser vistos como buenos chicos, no fuera el caso.... En cuanto a los exiliados están luchando contra la podredumbre sistémica de la judicatura -y la fiscalía y la policía- españolas a rebufo de la justicia europea, que aparte de ser lenta y parsimoniosa también sabe cerrar los ojos cuando lo que dilucida puede causar un estropicio en la propia UE. La justicia europea puede ser justa juzgando a Polonia, Hungría o Bulgaria pero cuando se trata de España se auto exige más precisiones y condicionamientos que no con estados menos influyentes de la Unión. Por esto el caso del espionaje de Pegasus, en cuanto al catalangate está siendo difuminado en el Parlamento Europeo. Y por esa misma razón el abogado general de la UE dice que la vulneración de derechos en España debe probarse que es sistémica y no circunstancial.... ¡Jo!. Que escudriñe cuidadosamente todo lo que la judicatura, la fiscalía y la policía patriótica españolas han hecho, hacen y harán contra los independentistas catalanes. Que se empape del filibusterismo empleado por los políticos unionistas en el Parlamento de Cataluña y en las Cortes españolas. Que se estremezca con las resoluciones dictadas por el Tribunal Supremo y Tribunal Constitucional, por el Tribunal de Cuentas y por la Junta Electoral Central cuando se ocupan de los asuntos catalanes. ¿Y qué podemos decir de la policía patriótica, en conjura permanente con fiscales afinadores y jueces inquisitoriales, inventándose pruebas, delitos, chantajes y manipulando leyes, atestados y mintiendo en sede judicial con absoluta impunidad y descaro?.

Creo sinceramente que el Consell de la República impulsado por Carlos Puigdemont es una muy buena herramienta para continuar la batalla de la independencia. Pero también creo que este protagonismo del presidente es aprovechado por los adversarios políticos de Junts -ERC, CUP y otros independentistas- para acusar al Consell de partidismo y carencia de transversalidad. El independentismo no se escapa de envidias y egos ofendidos, ridículos y sobrantes aquí al igual que podemos encontrar en otras circunstancias que rodeen al hombre, salvo, claro, cuando se trate de los políticos. Pese a que participan algunos militantes republicanos, de la CUP y personas independientes y que Carles Puigdemont ha dejado la presidencia de Junts, el Consell es tildado de partidista. En lugar de implicarse a fondo y cambiar desde dentro las dinámicas más o menos partidistas que pudieran existir, prefieren quedarse al margen y criticar y malhablar de esta institución, dañando a todo el movimiento independentista, mostrando desunión, recelos y antagonismo cainita. Y todo esto mientras los nacionalistas españoles se frotan las manos y aplauden hasta con las orejas.

A pesar de lo que se pueda pensar por todo lo expuesto hasta ahora, hay algo que nos une a todos: conseguir la independencia de Catalunya lo antes posible. Las percepciones que tengamos unos de otros, a pesar de la falta de empatía que mostramos, a pesar de los reproches y los insultos que nos hacemos y lanzamos unos contra otros, sin embargo, la meta insoslayable común sigue siendo la independencia. Porque sabemos que la represión española no se detendrá. Que el acoso policial, fiscal y judicial en España tienen vida propia al margen de la ley y la verdadera justicia. Que España nunca pactará ni amnistía ni autodeterminación. Que el gobierno seguirá haciendo promesas que nunca cumplirá. Que continuará el ahogo financiero y el expolio fiscal en Cataluña. Que los presupuestos nunca se van a ejecutar al 100%. Que las inversiones en infraestructuras nunca satisfarán las necesidades de Catalunya. Que continuarán queriendo aniquilar la lengua y la cultura catalanas. Que vamos a seguir siendo considerados como la última colonia del Imperio Español. Que España nos va a la contra. Que las cloacas del estado nos han declarado la guerra, tanto da que sea sucia o limpia. Que siempre tienen dispuestas para nosotros otras dos tazas de aceite de ricino si nos quejamos o criticamos la sagrada y petrificada constitución española.

¿De verdad vale la pena seguir criticando, insultando y mostrando desunión entre independentistas para hacer el juego a España, en lugar de sumar esfuerzos, inteligencia y valentía para conseguir la independencia?. ¿De verdad estamos dispuestos a derrochar todo el esfuerzo empleado hasta ahora, después de haber sufrido represión, violencia, prisión, exilio, persecución policial y venganza siciliana?.

Sabemos que para conseguir la independencia deberemos enfrentarnos a un estado que no cree en los principios democráticos, que tiene un estado de derecho más parecido al turco o bielorruso que no al Reino Unido, Canadá o Dinamarca. Sabemos que sufriremos represión y violencia como nos ha demostrado siempre el Reino de España en cuanto se ha enfrentado a la cuestión catalana. Sabemos que para conseguirlo deberemos arremangarnos y luchar, enfrentarnos a un estado violento, desobedecer sus leyes, normas, constitución, jueces, fiscales, policías, el gobierno, las Cortes y su Majestad el Rey Felipe. Deberemos hacer oídos sordos a la prensa del régimen, a gacetilleros amarillentos y a las ratas de alcantarilla que señorean por todo el Estado. Es decir, sabemos que deberemos hacer lo mismo que han hecho otros pueblos para conseguir la independencia. Y finalmente sabemos que la independencia de un país siempre causa dolor, miedos, sufrimiento e incertidumbre.

Pero también sabemos que una vez conseguida la independencia entonces gozaremos de verdadera libertad, justicia y prosperidad. Sabemos que todo esto lo conseguiremos con nuestro esfuerzo -¡nunca nos han regalado nada, al contrario!-, manteniendo nuestros principios democráticos y sin que nadie nos condicione ni nuestros recursos, ni nos cuestione nuestras decisiones, ni nos haga la guerra sucia cultural, económica, financiera y policial. Y sabemos que para no estropear la independencia sólo debemos procurar no cometer los mismos errores y excesos que España ha cometido con Catalunya y con los catalanes.

Claro que todas estas reflexiones y percepciones mías son absolutamente subjetivas y personales.....


dissabte, 2 de juliol del 2022

EL AGUJERO NEGRO ESPAÑOL.

No recuerdo bien si fue José María Aznar -o quizás uno de sus ministros- que en los primeros gobiernos de su presidencia anunció a bombo y platillo pero sin tapujos que las inversiones del estado debían hacerse preferentemente alrededor de Madrid, no más allá de 200 a 300 km de la capital. Estamos hablando de la segunda mitad de los años 90 y primeros de los años 2000, después del "váyase señor Gonzalez". Concretamente esta consigna la dio durante la segunda legislatura ya con mayoría absoluta, cuando ya no necesitó apoyo ni pactos del Majestic con los nacionalistas catalanes para obtener la investidura. Es decir, fue entonces cuando mostró desinhibidamente la chulería y prepotencia que le caracterizan.

Todos aquellos que se preguntan porque las inversiones del estado ejecutadas en Madrid siempre son mucho más elevadas en la capital de España que en Cataluña, ya deberían saberlo..... ¡puesto que estaban avisados!. Cataluña se halla fuera del círculo virtuoso configurado entorno la villa y corte, fijado por José María Aznar López en un radio de no más de 300 kilómetros alrededor del ombligo del reino. Círculo, por cierto, que han hecho suyo todos los anteriores y sucesivos presidentes del gobierno que ha habido antes y después de él, independientemente del partido que haya gobernando, incluido el actual gobierno progresista de coalición más exitoso de la historia universal.

Es por esta razón que las inversiones del estado en el País Valenciano, en las islas Baleares y en Cataluña -los Països Catalans se materializan oficialmente en su imaginario político y por lo tanto ¡ya somos una gozosa realidad!-, siempre quedan muy por debajo de lo presupuestado para cada una de las comunidades mencionadas. ¡Y esto ocurre porque nos encontramos fuera el círculo virtuoso de España!. Al igual que ocurre con la financiación, por cierto. ¡Y con la cultura y la lengua común de estos territorios!. Fuera del ombligo del mundo hace mucho frío.... Como también ocurre en la atribulada España vaciada. También conocida como la España escalofriantemente esquilmada. De hecho, podemos decir sin ningún tipo de pesar que el círculo virtuoso en torno a Madrid es en realidad un inmenso agujero negro chupador de justicia y libertades, capitales y empresas, instituciones y personas, digno de ser estudiado por Stephen Hawking si todavía estuviera vivo.

Así pues, el estado más descentralizado del mundo, más democrático y el estado de derecho ejemplo para otros estados, en realidad es un agujero negro al igual que lo es Sagitario A en el centro de la Vía Láctea. Devora y desmenuza todo lo que se encuentra dentro de su horizonte de sucesos.....

El problema de los agujeros negros es que para crecer deben tragar todo lo que cae a su alcance. Por tanto, si te encuentras fuera de su horizonte de sucesos -¡del círculo virtuoso!- llega un momento que no puede crecer más por falta de combustible y entonces se convierte en una nada invisible que para hacerse notar no puede dejar escapar ni siquiera la luz.

Los agujeros negros necesitan materia para sobrevivir. Y al mismo tiempo, la materia para vivir necesita estar lejos del círculo de influencia del agujero. Por tanto, los Països Catalans indefectiblemente reconocidos por España visto el maltrato que históricamente nos dispensa, para vivir iluminados por el Sol de la prosperidad, libertad y justicia sólo necesitamos una cosa: Alejarnos raudamente del agujero negro que es Madrit. Hacerlo juntos o confederados entre nosotros, pero fuera de su horizonte de sucesos. Es decir, ¡necesitamos la independencia!. En estos momentos la independencia es más necesaria como nunca lo ha sido antes.

En resumen!. Más claro, agua..... Y más oscuro, Madrid.



dimarts, 31 de maig del 2022

"LO QUE MÁS SE PARECE A UN ESPAÑOL DE DERECHAS ES UN ESPAÑOL DE IZQUIERDAS".

Estos últimos días se ha constatado fehacientemente que la mierda que flota en las cloacas del deep state español ha empezado a rebosar, impregnado hasta cubrir todas las instituciones de este Estado que se jacta ser de derecho y presume ser una democracia plena y consolidada, quedando muy lejos, pero, de cómo son las del resto de Europa.

La Corona, Tribunal Constitucional, Tribunal Supremo, Audiencia Nacional, Tribunal de Cuentas, Defensor del Pueblo, alta y media judicatura, fiscalía, Policía Nacional y Guardia Civil, fuerzas armadas, espías y servicios de información, partidos políticos, ejecutivo, legislativo, alto y medio funcionariado, medios de comunicación públicos y privados, periodistas.... Absolutamente todas las instituciones de España, con una marcada huella franquista en su haber, desprenden un fuerte e insoportable hedor que sólo puede provenir de la mierda que esparcen las ratas de alcantarilla que reinan, ahora ya por todas partes, dentro de las más altas y bajas estructuras de un estado en franca decadencia y que puede acabar en estrepitosa quiebra más pronto que tarde.

La constatación de esta enmerdada generalizada proviene del hecho de que se han manipulado atestados policiales, se ha juzgado a inocentes sentenciándolos injustamente, se ha perseguido policialmente a adversarios y disidentes políticos hasta abocarlos al exilio o prisión. Se han expoliado patrimonios particulares con falsas acusaciones de malversación, se ha espiado y violentado los derechos de todo tipo a ciudadanos independentistas -¡pero demócratas!- por el hecho de serlo. Y ahora ya podemos decir sin tapujos que, para rematarlo, se ha demostrado que incluso han manipulado procesos electorales al Parlament de Catalunya y en elecciones municipales. La auto denominada policía patriótica poniendo en marcha la Operación Catalunya se inventó informaciones falsas, difundidas y magnificadas por la prensa cavernaria afecta al régimen, para perjudicar a Artur Mas, Xavier Trías e incluso al expresidente del Barça Sandro Rossell para perjudicarles personalmente a ellos y a sus partidos, a base de difamaciones para combatir y perjudicar su actividad política. También se jactan de haber comprado con fondos reservados a testigos mentirosos para construir relatos cargados de falsedades, señalando indicios y acusaciones contra personas e instituciones absolutamente inocentes pero defensores de la soberanía e independencia de Catalunya. Por no hablar del acoso que someten entidades ultraderechistas enardecidamente españolistas a la lengua catalana en la escuela con la complacencia -¡y complicidad!- de la judicatura nacional-católica castellana.... A pesar que el olor de la enmerdada general ya se percibió cuando todo esto ocurrió -y aun ocurre-, ahora lo reconocen abiertamente con absoluta desvergüenza porque se saben impunes ante la (in)justicia castellana y la comprensión de muchos de sus compatriotas.

La certeza que tenemos los catalanes es que todo ello sigue pasado -cómo ha pasado siempre- porque cuando se trata del problema de Cataluña y los catalanes no se puede distinguir lo que es capaz de hacer un gobierno de derechas de lo que hace uno de izquierdas. Un ejemplo muy reciente es la aplicación del artículo 155 de forma consensuada por todos los partidos nacionalistas españoles, el cual a pesar de haber sido formalmente revertido sigue plenamente vigente como aquello de "que se consiga el efecto sin [aunque] se note el cuidado", dictado a principios del siglo XVIII por el fiscal del Consejo de Castilla....... Desde siempre, derechas e izquierdas son culo y mierda. "Lo que más se asemeja a un español de derechas es un español de izquierdas", dice un viejo dicho atribuido al escritor Josep Pla.

Y pues, ¿qué podemos hacer desde Cataluña? ¿Qué respuesta debemos dar ante este persistente acoso arrollador anticatalanista que inmemorialmente nos muestra España?. ¡Pues tenemos que mantener intactos los principios democráticos y la dignidad de las personas y las instituciones catalanas!. Pero, ¿cómo hacerlo?.

La dignidad debe mantenerse mediante gestos y decisiones valientes. De entrada, debemos renunciar a suplicar que esta gente tan antidemocrática se sienten en una hipotética mesa de negociación ante nosotros porque es imposible entablar negociaciones con verdugos que te espían y te reprimen para aniquilarte. En segundo lugar -pero no menos importante- todos los parlamentarios catalanes en las Cortes españolas deberían levantarse de sus escaños en defensa de Cataluña, de los derechos civiles y de los principios democráticos que son sistemáticamente vulnerados por todas las instituciones españolas. Levantarse y abandonar los escaños de una forma visible, notoria y todos a la vez. Convocar a los medios de comunicación en la sala de prensa -¡si no lo prohíben!- para explicar el porqué y hasta cuándo se ausentarán del pleno. Hacerlo en medio de un debate donde esté todo el gobierno y tome la palabra el presidente del ejecutivo español. Y para terminar, desde el gobierno de la Generalitat debe hacerse una contundente declaración institucional instando a la población a la desobediencia general, individual y colectiva, para defender los principios democráticos, un verdadero estado de derecho y la dignidad de las instituciones catalanas, ante el embate anticatalanista que el Estado español mantiene contra Cataluña desde tiempos inmemoriales.

Todo esto se sustentaría hasta alcanzar la independencia de Cataluña ya que el Estado español es incapaz de ser un estado de derecho y una verdadera democracia auténticamente homologable al resto  de estados de Europa que lo son...




dilluns, 2 de maig del 2022

ESPAÑA NO ES DE ESTE MUNDO..... ES MÁS BIÉN DE GUERRAS SUCIAS.

Creo que ya estamos en condiciones de hacer inventario de todo lo que ha pasado -y que todavía ocurre y seguirá pasando- en las tortuosas relaciones que mantienen España y Cataluña. Cabe decir que no son precisamente relaciones sencillas ni normales. Más bien se asemejan más a las que mantienen una metrópoli prepotente y soberbia con una colonia amante de la independencia y la libertad, aunque persistentemente díscola.

¡Veamos!. Desde la vergonzosa y humillante sentencia sobre el estatuto dictada por un Tribunal Constitucional absolutamente deslegitimado, la mayoría de catalanes decidimos que hasta aquí habíamos llegado y que la única alternativa que nos quedaba era alcanzar la independencia. Y nos pusimos a ello.....

Manifestaciones y performances multitudinarias año tras año pidiendo la independencia; consultas populares en cientos de pueblos y ciudades catalanas; oferta de la Generalitat para negociar un pacto fiscal rechazado por el Gobierno; delegaciones del Parlament catalán ante las Cortes españolas para debatir y que autorizaran realizar un referéndum de autodeterminación pactado; consulta de la Generalitat a la gente ofreciendo votar hasta tres alternativas distintas; debates de leyes y resoluciones en el Parlament boicoteados por las formaciones españolistas..... ¡Lo intentamos todo!. Y la respuesta siempre fue la misma: ¡No, no y no!. Incluso convocamos un referéndum -en absoluto ilegal porque convocar referéndums está expresamente despenalizado en España- donde la opción a la independencia obtuvo una abrumadora mayoría. Aunque por lo visto para España esto de apelar a los principios democráticos y que los ciudadanos ejerzan derechos universalmente reconocidos en cualquier estado verdaderamente democrático no sirve para nada. España no es de este mundo.

Las respuestas a todas las iniciativas catalanas pasaron de las burlas y desprecios más hirientes a la más brutal de las represiones violentas que jamás se hayan ejercido en España. Ni en los peores momentos de la mal llamada transición de la dictadura a la dictablanda -de la ley a la ley- se persiguió con tanto ensañamiento a todo un pueblo. Ni en los años de plomo del País Vasco las manifestaciones acababan bajo la brutalidad policial española como la ejercida contra los catalanes. Tampoco podemos olvidar el papel desempeñado por la prensa española, más cavernaria y anti-catalana como nunca había ocurrido hasta entonces. No se conformaban con burlarse. También insultaban, se inventaban noticias, hacían titulares escandalosos y atizaban boicots comerciales contra productos catalanes, invitando a las empresas catalanas a marcharse fuera de Cataluña. A su vez, toda la caballería conformada por jueces, fiscales, policías y guardia civil se puso en marcha contra millones de ciudadanos que sólo queríamos ejercer democrática y pacíficamente el derecho de autodeterminación. Así empezaron su abrumadora guerra contra los catalanes, que dura hasta hoy y se prolongará hasta mañana y más allá. Ni las finanzas de los represaliados y exiliados políticos se libraron de la venganza siciliana iniciada por el Estado. Fueron y son expoliados por el más nepótico Tribunal de Cuentas que jamás haya existido, sin pruebas fehacientes de malversación y sí con absoluto ensañamiento. Ni los actos de solidaridad con los presos políticos, ya fuera con pancartas o lazos amarillos, quedaron sin persecución y condena, atizados por una Junta Electoral Central en funciones prepotentemente inquisitoriales. Y todo ello con la bendición del Tribunal Constitucional más anticonstitucional que se haya conocido hasta nuestros días.

A partir del 1 de octubre de 2017 España incrementó su represión de forma inusitada. Sintieron herido su orgullo nacional ante el empuje y determinación demostradas por la gente catalana poniendo urnas y papeletas -que las autoridades no encontraron a pesar de los esfuerzos desplegados en el empeño por la inteligencia española-, para ejercer nuestro derecho a votar, bajo los porrazos de Guardia Civil y Policía Nacional, así como defendiendo la democracia -¡las urnas!- ante la brutalidad desplegada contra hombres, mujeres, ancianos y jóvenes, armados con papeletas de votación y pletóricos de ansias por auto-determinarnos..... Y remachando el clavo, su borbónica majestad el rey Felipe VI lanzando mensajes anti-catalanes que se pueden resumir en el desgraciadamente ya famoso cántico de "a por ellos, oe.....". Un rey de todos los españoles -¡que no de los catalanes!- capaz de ponerse al frente del chantaje realizado a las empresas más importantes del país para que cambiaran el domicilio social y fiscal fuera de Cataluña y hacia España.

Ahora se ha confirmado que esta guerra sucia de los servicios de inteligencia españoles se ha efectuado directamente sobre unos sesenta ciudadanos catalanes más o menos vinculados al independentismo. Políticos exiliados o encarcelados, parlamentarios, presidentes de la Generalitat, consejeros, concejales, abogados defensores, periodistas, funcionarios, empresarios, ciudadanos de a pie..... Esta vulneración flagrante de derechos de todo tipo, de defensa -¿cuántas pruebas ilegítimas se habrán fabricado contra los condenados?-, de privacidad, de libre circulación y manifestación, que ya cuenta con más de 3000 represaliados, no tiene freno. El espionaje se esparce como una mancha de aceite no sólo a las personas directamente espiadas sino que también afecta a todos aquellos que han estado en contacto con ellos. Cientos de personas -tal vez miles- han sido y posiblemente seguiran siendo escrutados ilegítimamente por los servicios de inteligencia de un estado que vuelve peligrosamente hacia el agujero negro de una dictadura consolidada, como hay tantas en el Mundo y del cual jamás ha acabado de salir... ..

España no es un estado democrático. España no es un Estado de derecho. Los catalanes tenemos todo el derecho del mundo en afirmar que España es un Estado decadente, enfermo, corrupto y autoritario. Capaz incluso de servirse de la guerra más sucia, practicar el espionaje más chapucero y morir matando más y mejor que nadie para aniquilar la disidencia política.

Definitivamente, España no es de este mundo. ¡Y lo peor de todo es que los españoles no hacen nada para remediarlo!.

divendres, 8 d’abril del 2022

DE CONSENSOS Y BLINDAJES LINGÜISTICOS...

Érase una vez un gran consenso entre los grupos políticos del Parlament de Catalunya que permitió aprobar una ley de educación que blindaba el uso de la lengua catalana como la única vehicular en el sistema escolar catalán. Esta ley también garantizaba el aprendizaje de la lengua castellana, estableciendo que una vez finalizada la escolarización de los chicos y chicas catalanes, todos poseerían el dominio de ambas lenguas.

También las Cortes españolas aprobaron a su vez, -sin el mismo amplio consenso que en Catalunya, hay que decirlo- una ley de educación, bautizada como ley Celaá en honor a la ministra del ramo. Establecía una serie de requisitos y normas comunes para todo el estado, sin que esto significara cuestionar la ley catalana y mucho menos la condición de vehicular del catalán en Cataluña. 

Pero he aquí que la justicia castellana -¡nunca mejor dicho!- decidió que tenían razón los padres de unos alumnos que exigían que el castellano fuera también lengua vehicular en Cataluña porque "sus hijos tenían todo el derecho del mundo a recibir el enseñanza en la lengua hegemónica en todos los ámbitos de la sociedad en España". Naturalmente se referían al castellano. Y cómo adujeron que el castellano -¡el español!- estaba perseguido y en peligro en Catalunya, los jueces sentenciaron a favor de ellos de una forma bastante esperpéntica: Si unos padres lo pedían todo el aula debía recibir la lección en español. Así se preservaba el derecho de un alumno castellanohablante a recibir la enseñanza en su lengua por encima del derecho del resto de alumnos del aula a recibir la enseñanza en catalán.... Y por si no quedaba suficientemente clara la hegemonía y consideración especial debida al español, se imponía que todas las escuelas implicadas debían dar el 25% de las clases en castellano.

De poco sirve aprobar leyes con tan amplios consensos y proclamar blindajes irreales, si una sola familia ardientemente españolista que menosprecie el catalán y un juez complaciente con ese menosprecio, cambian la letra y el espíritu de unas leyes aprobadas en el parlamento por amplísima mayoría basadas en criterios meramente pedagógicos y sociales, para satisfacer las pulsiones anti-catalanas y los supuestos derechos de unos padres a decidir por razones puramente políticas qué, cómo y cuánto hay que enseñar a sus hijos en la lengua hegemónica en el Estado, modificando la ley vigente y el currículum escolar de cada centro y vulnerando el derecho del resto de alumnos catalanes porque estos falsos no nacionalistas españoles, por manifiesta politiquería, no aceptan el catalán -¿por motivos de odio?- como lengua vehicular en Cataluña.

Lo hacen utilizando a sus hijos como arietes contra la lengua propia de Cataluña. Lo hacen acusando a la escuela catalana de adoctrinamiento nacionalista catalán, de persecución de la lengua española y de nazis porque utilizan el catalán en lugar del español, como creen ellos que debería ser..... Quieren aniquilar el catalán para imponer la lengua de Castilla como último eslabón de la cadena colonizadora definitiva que religue Cataluña a la España imperial para siempre. Y no quieren reconocer que Cataluña es un país diferente a Castilla -¡a España!- y que tiene los mismos derechos y merece la misma consideración y respeto que cualquier otra nación de Europa y del resto del Mundo.

Todas estas acusaciones -en realidad, inverosímiles excusas- son el producto de mirarse en el espejo y no reconocer que tales imputaciones les definen mejor a ellos que a los catalanes.

Hace más de trescientos años que Castilla -ahora conocida como España- está intentando borrar a Cataluña de la nómina de naciones libres. La colonización emprendida después de la conquista a sangre y fuego en 1714 abarca todas las instancias, todos los ámbitos de la sociedad y a todos los ciudadanos catalanes. Singularmente la lengua del país, el catalán. Antes lo hacían sentenciando "que se consiga el efecto sino que se note el cuidado". Hoy les importa un bledo que se note el cuidado. Lo hacen con todos los medios a su alcance. La fiscalía, la judicatura, las leyes, la prensa, la economía, las finanzas, la tele, la radio, el cine, descabezando derechos, manoseando y violentando la democracia y el estado de derecho..... ¡Todo sirve para aniquilar el catalán!. ¡Es decir, para aniquilar Cataluña y los catalanes!. Todo vale para glorificar la España inmemorial, es decir, la Castilla imperial.

Siglo tras siglo, año tras año, mes tras mes España fracasa en el intento. Porque los catalanes somos y seremos catalanes por y para siempre. Como un francés, un escocés, un ucraniano o incluso un español son y serán de sus respectivos países.

De la misma forma que a ningún nacional de cualquier otro país se le pide que renuncie a sus raíces, ¿porqué narices los catalanes debemos renunciar a nuestra nación, a nuestra lengua, a nuestra cultura, a nuestra libertad?. ¿Porqué lo diga un no nacionalista español? ¿Porqué lo quiera un político populista de Madrit?. ¿Porqué lo sentencie injustamente un juez inquisitorial?.

¡Ni en broma renunciaremos a nuestra lengua!. Ni a nuestra nación. ¡Nunca!. Ya seamos o no nacionalistas, independentistas o soberanistas..... Nunca dejaremos de ser lo que somos: ¡catalanes!.

¿Todavía no se entiende porque queremos la independencia, ya?

dilluns, 28 de març del 2022

¿SE ESTA EXTENDIENDO UNA SENSACIÓN DE DERROTA?.

Tengo la percepción de que se está extendiendo una sensación de derrota entre el mundo independentista. Parece como si la rendición, las manos en alto ante el embate del Estado hubiera sustituido la alegría de la libertad e independencia que hasta no hace demasiado tiempo llenaba nuestros corazones, hervía en nuestros cerebros y movía casi todas nuestras acciones.

Creo que esta percepción aun siendo evidente, no es verdadera. Los independentistas no nos hemos rendido ni mucho menos. Lo que ocurre es que los partidos políticos, empujados por líderes miedosos, pusilánimes e incluso políticamente ineficaces, rodeados de varios militantes sectarios del núcleo duro de cada partido haciéndoles la pelota, no han respondido a las expectativas que se esperaba de ellos. Esto vale tanto para Junts, como para las CUP y especialmente para ERC.

Esquerra es la clave del desencanto, todo debe decirse. Por esto me fijo más en ellos. Es la formación independentista supuestamente hegemónica -así se auto consideran-, la más votada, con más escaños -uno más que Junts- y con más representación en las Cortes españolas. Por tanto, su responsabilidad dentro del movimiento soberanista es la más importante, porque son quienes tienen más peso..... en la generación del desencanto independentista.

Este peso -¡en realidad derroche!- que ostentan los republicanos está socavando a todo el movimiento independentista. Controlan y condicionan muchos medios de comunicación públicos o incluso privados. Por tanto, disponen de la atención mediática en Cataluña pero también en España. En Cataluña, magnifican la presidencia, su partido y la labor política que desarrollan. Sin una mínima autocrítica propia ni ningún tipo de crítica sobre los medios que les favorecen tan apasionadamente. En España les adulan  para que apoyen al gobierno de Sánchez, para que voten leyes supuestamente de tipo social y para que acepten unos desvaídos acuerdos favorables a Catalunya, negociados a toda prisa entre Gabriel Rufián -portavoz de grupo republicano en el Congreso- y el PSOE, que están más vacíos de contenido que un globo hinchado con aire. Este diputado está más preocupado en caer bien al Gobierno y a PODEMOS y hacer tuits llamativos contrarios a Junts y al Consell de la República que conseguir algo favorable a los intereses de los catalanes. Incluso se permite cultivar la discordia entre las formaciones independentistas dando por buenas las mentiras y acusaciones que el Estado divulga contra Carles Puigdemont y otros independentistas del exilio. En definitiva, Rufián es el paradigma del fracaso de Esquerra Republicana en Madrid.

Despilfarro que también dilapida un Muy Honorable Presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, más dedicado a hacer anuncios grandilocuentes con muchos aspavientos y palabras que no dicen nada que no defender sin tapujos los intereses de los ciudadanos -independentistas o no-, la dignidad de la institución que preside y reclamar el reconocimiento y respeto debido a la nación catalana, obviando que no somos una mera comunidad autónoma más dentro del Estado español. Pero por encima de todo, está incumpliendo el mandato que el pueblo otorgó a su partido cuando obtuvo la mayoría dentro del movimiento independentista. Nada de lo que hace favorece el acercamiento de la independencia mientras se dedica a fortalecer un autonomismo que para si lo hubiera querido el ínclito Duran i Lleida arraigado en el Palace -con pájaro en mano incorporado-, en sus mejores momentos políticos madrileños. El presidente Aragonés, anunciando que quiere ensanchar la base independentista y sentarse en la mesa de diálogo para hablar con los verdugos de la represión, está consiguiendo todo lo contrario de lo que anuncia: ensancha y fortalece la base autonomista mientras aleja y debilita la mayoría independentista....Como parece que quiere que pase un peso pesado dentro del partido, el ex-portavoz en Madrid Joan Tardà. ERC está haciendo más a favor de una hipotética República Española -hoy en día una monarquía impune a corrupciones reales- que por la proclamación de la República Catalana. En cuanto a Oriol Junqueras flaco favor hace al independentismo y a su partido participando en shows televisivos de la mano del friki Mario Vaquerizo, sacando los colores de la vergüenza en las mejillas de todos los que le apoyamos cuando fue injustamente juzgado, condenado, encarcelado y después graciosamente indultado por el rey nuestro señor, Su Majestad Felipe VI..... ¡Esperpéntico!.

En cuanto a Junts y las CUP nunca encuentran el momento adecuado para actuar con la coherencia política que requiere la actual situación que sufre Catalunya. No se atreven a romper la baraja marcada que comparten con ERC..... ¿Por miedo a perder el escaso poder que disfrutan, tal vez?. Las CUP sólo saben hacer asambleas para decidir que las decisiones a tomar las decidirán en una asamblea convocada el próximo fin de semana... No se implican en la gobernanza de país porque es poco de izquierdas o es muy derechas. Nada de lo que propone el gobierno les parece aceptable y critican y amenazan con la ruptura por cualquier decisión que no favorezca la consecución de la revolución pendiente, la cual quedará pendiente para siempre si depende de su asamblea. A las CUP no se puede decir que la culpa la tienen los líderes de la formación porque no los hay. La culpa reside en la pesada dependencia de la asamblea. Son democráticamente impecables y coherentes pero políticamente muy deficientes..... Son ineficaces y lo que es peor: ¡prescindibles!.

Y Junts, a quienes hay que reconocer que mantiene el discurso más pro independentista entre las formaciones catalanas, no disfruta ni de la autoconfianza ni la fuerza necesarias para revertir el callejón sin salida en el que todos juntos han metido en Cataluña y a la independencia. Todo queda en meras palabras sin consecuencias. La búsqueda de la deseada unidad del independentismo la están convirtiendo en la búsqueda del Santo Grial.... Parece que hay intereses contrapuestos dentro de ellos, según qué corriente defienda cuestiones como Olimpiadas 2030 si o no, a favor o contra de la ampliación del aeropuerto, si o no al Consejo de la República o tragarse o no todos los sapos que ofrecen sus compañeros de gobierno. O si Carles Puigdemont debe ser el líder del Consell de la República y de Junts a la vez o debe dejar el cargo de Junts, o del Consell... Estas indecisiones, estas discrepancias internas pero públicas no les permiten tomar las decisiones adecuadas y consecuentes con lo que defienden más que nadie pero también más ineficazmente que los demás: la independencia de Catalunya.

Sólo hay una cosa que puede revitalizar este estado de postración en que se encuentra el independentismo. Una victoria judicial europea del exilio sobre las actuaciones españolas y el afán de judicializar la política y politizar la justicia que ha hecho, está haciendo y seguirá haciendo España, puede causar -¡y causará!- un estrépito no sólo en todas las instituciones del Estado, sino que reiniciará el movimiento independentista con una fuerza y ​​empuje como nunca se ha visto a pesar que actualmente se mantiene en el ralentí.

Y entonces, la gente, los independentistas ahora amodorrados y cabreados, reencontraremos las ganas, la fuerza y ​​el empuje que nos han hurtado unos líderes miedosos, incapaces y prescindibles, así como unos partidos institucionalizados, pesados ​​y acomodados, los cuales han preferido priorizar las luchas cainitas atacándose entre ellos mientras se miran el ombligo y no hacen nada para restablecer la unidad y una hoja de ruta común hacia la libertad, sin malgastar el empuje y la fuerza de la gente que anhelamos la independencia y que les habíamos dado de todo corazón.....

Prescindiremos de todos ellos puesto que no parecen capaces de rectificar.

¡Esta desconfianza se la han ganado a pulso y por lo tanto, se la merecen!.

dissabte, 5 de març del 2022

¿LA HORA DEL RIESGO....?.

Confieso que, como muchos ciudadanos, estoy decepcionado. Mi desencanto proviene del talante que están mostrando los partidos políticos catalanes, ahora ya de una forma pública y descarada y que a pesar de todo se auto consideran republicanos e independentistas. El gobierno de la Generalitat se está convirtiendo en una especie de gestoría administrativa, una verdadera sucursal del Gobierno del reino de España, que ejerce unas competencias supuestamente autónomas, absolutamente condicionadas política y administrativamente, controladas férreamente por Madrit y delegadas graciosamente por un abrumador poder central de raíces genéticamente franquistas. Es decir, están normalizando el autonomismo de poca monta que tolera un estado auténticamente centralista y autoritario, el cual ya podemos calificar como una democracia defectuosa, según la autorizada opinión de The Economist...... Aunque yo diría que es más bien un estado descaradamente trilero.

Tanto Junts per Catalunya como especialmente Esquerra Republicana -por ser el partido alfa del mundo independentista- e incluso las CUP, quieren pero no pueden librarse de la telaraña que el Partido Socialista y Podemos han extendido sobre ellos. Las imposiciones de Pedro Sánchez y sus compañeros de viaje llegan hasta el punto de hacer tragar a las formaciones independentistas sapos a raudales y cada vez de mayor tamaño. Una mesa de diálogo fantasmagórica, apoyo a la investidura de Sánchez -¿a cambio de los indultos, tal vez?-, presupuestos aprobados con los votos de PDCat y ERC o continuar la persecución policial, política, económica y judicial contra los catalanes -casi 3000 ciudadanos hasta el momento-, así como las continuas inhabilitaciones de electos independentistas a cargo de la JEC, el inagotable acoso y labor de desgaste contra la lengua catalana emprendida por fiscales, jueces y políticos, son algunos de los sapos que se están tragando tanto el gobierno de la Generalitat como los partidos independentistas. Y de paso, el resto de ciudadanos. Por no hablar de las humillaciones y desprecios que dedica Pedro Sánchez directamente a Pere Aragonès y su gobierno. Mientras, el presidente de la Generalitat va dictando solemnes conferencias para seguir suplicando diálogo con quien no quiere dialogar, refiriéndose a la Catalunya entera como si estuviera desmenuzada y queriendo recoser la unidad independentista rota a causa de los acuerdos subscritos con Podemos, Colau y Sánchez.

¡Todo esto es decepcionante!. Desgraciadamente los partidos independentistas y muy especialmente el Gobierno de la Generalitat están malgastando el capital político acumulado durante el referéndum del 1 de octubre y el resultado obtenido, la huelga general del 3 de octubre y la DUI del 27 de octubre de en 2017. En cuatro años han dilapidado todo aquello que ganamos a partir del estallido del proceso independentista desde el ya lejano 2009, a partir de la consulta popular de Arenys de Munt.

¡El problema, pues, son los partidos políticos!. Y un gobierno de la Generalitat más dispuesto a obedecer todo aquello que se ordene desde Madrid antes que el mandato conseguido en las últimas elecciones gracias a la obtención de 74 escaños -¡mayoría absoluta holgada!- con un 52% de votos a favor de la independencia. ¡Pues bien!. Pese a esta doble mayoría absoluta, la consecución de la independencia ya no es la prioridad para ellos. Ahora están más preocupados en ensanchar la base sumando Los Comunes -¡que no quieren la independencia!-, gobernar el día a día autonómico y no desestabilizar al gobierno de coalición más progresista de la historia de España, no fuera el caso que llegara al poder la extrema derecha y derecha extrema, como si estos dos extremismos no tuvieran ya todas las instituciones españolas en sus manos. En definitiva, están más ocupados y preocupados por lo que ocurra en España que por lo que interesa a Cataluña y los catalanes.

También están priorizando la lucha -cainita, por cierto- para ver qué partido es el hegemónico dentro del mundo independentista y qué líderes son más o menos traidores, más o menos osados o cobardes, más o menos independentistas puros o impuros, o más o menos pardillos. Están desperdiciando el capital político acumulado por el exilio, a causa de miserables cuestiones partidistas y celos ególatras. Se puede decir que todos están condicionados por la dura represión que han sufrido en la cárcel, en el exilio, que todavía estamos sufriendo los ciudadanos y que no tiene freno. En definitiva, el miedo atenaza los principios..... ¡y desgraciadamente, también los finales!.

¡Pero no nos confundiéramos! Esta decepción que sentimos muchos ciudadanos no es la rendición que parecen buscar los políticos españoles y quizás incluso algunos catalanes. Este desengaño no quiere decir que nos conformamos sumisamente con la situación a la que nos han abocado los atemorizados políticos que nos gobiernan en estos momentos. Porque su frustración partidista y su rendición ante las instituciones españolas fortalece la determinación independentista del resto de catalanes. Nuestro deseo de independencia permanece intacta, ¡no tiene marcha atrás!. Por más decepcionados que estemos.

Al fin y al cabo acabaremos pasando por encima de los partidos políticos. Acabaremos rechazando y despidiendo sin contemplaciones a líderes fake partidistas, egoístas, cínicos y obedientes a Madrit.

Han tenido cuatro años de gracia y los han desperdiciado. ¡Los han derrochado!. Así pues, una nueva ola tempestuosa arrollará estos castillos de arena en que se han convertido ERC, JxCat, CUP -y su asamblearismo farragoso-, Aragonés, Junqueras, Sánchez y toda la guardia pretoriana que les rodea.

Ahora vuelve a ser la hora de la gente, de la sociedad civil. Es hora de volver a la calle y ocupar las plazas. Ahora es la hora de la sensatez atrevida, de la desobediencia e insumisión, pacíficas pero contundentes. Y de la confrontación política contra unas instituciones españolas carentes de principios democráticos. ¡Es la hora de asumir nuevos retos y riesgos!.

Tal vez va siendo la hora también del arrebato..... Todo lo sensato que se quiera, pero arrebato al fin y al cabo.

dimecres, 19 de gener del 2022

"TRIGO" NO, "BLAT" SI. ¡MUERA ESCAÑA!.

A decir verdad, no sé sobre qué escribir. Podría hablar de la cantidad de indocumentados que pululan por Twitter. Y en Facebook, Instagram o Tik Tok. También podría hacerlo sobre algunos periodistas que desmerecen el oficio o algunos diarios que de amarillos que son parecen tener ictericia. Y qué decir de algunos programas de TV que no tienen credibilidad ni ética de ningún tipo. Ufffff.....

¡Tranquilidad!. No voy a hablar de ninguna de estas cosas porque no me considero un juez imparcial. Ni siquiera un crítico objetivo. Yo, como casi todos los seres humanos, soy una víctima más de todos ellos. Sufro las mismas malas influencias que cualquier otra persona. Los insultos en Twitter, las descarnadas críticas en Facebook o las tonterías de Tik Tok me abruman. ¿Y qué decir de los periodistas que quieren influenciarme publicando mentiras -fake news lo llaman ahora- o de los periódicos que quieren manipularme desvergonzadamente? Incluso pretenden condicionar mis preferencias electorales publicando encuestas que de tan mal cocinadas que están causan dolor de vientre. Y para rematarlo, algunos partidos españolistas no dudan en utilizar todos estos aparatos y medios en beneficio propio para difundir mensajes que se adentran peligrosamente hacia los abismos más profundos del fascismo, del supremacismo con toques colonialistas y del nacionalcatolicismo, siempre presentes en el seno de todas las instituciones de España.

La última campaña iniciada por C's contra Catalunya ha sido sobre un programa de la TV pública, que se hace naturalmente en catalán, donde una joven concursante ha pedido responder una pregunta en castellano y el presentador ha dicho que debía hacerse en catalán. La chica quería decir "trigo" y la respuesta era "blat". ¡La que se ha armado!. En las redes, en la prensa y las teles españolas. Supremacismo, xenofobia, nazis, adoctrinamiento, limpieza étnica, anti-españolismo..... Todo esto y mucho más es lo que se está diciendo contra el presentador, contra TV3 y de paso contra los independentistas. ¿Alguien se imagina que en un programa similar de Tele Madrid uno de los concursantes quisiera dar la respuesta en francés, inglés, mandarín o catalán?. ¿También lo considerarían como apartheit, supremacismo, anglo-fobia, franco-fobia o mandarino-fobia?. ¡Jamás!. ¡Nunca!. Ésta es la prueba más fehaciente del grado de catalanofobia que existe esparcida por todo el estado. Que C's se apresura en atizar aún más reclutando a 150 familias voluntarias castellanoparlantes para que denuncien ante la justicia española a diferentes colegios catalanes para que sentencien a favor del 25% de castellano en las aulas, imponiendo al resto de escolares las fobias de C's hacia el catalán, consolidando así la avasalladora hegemonia del castellano en Catalunya. Todo ello, utilizando como ariete anti-catalán a los niños en edad escolar.....

Aunque...... Todos estos buenos patriotas, todos los medios de comunicación, todas estas redes sociales tienen algo en común: Todas pretenden aniquilar la disidencia política. Y si nos ceñimos a España, la disidencia se llama independentismo catalán. Pero al hacerlo no se limitan a despotricar contra la independencia. A menudo, queriéndolo o no, lo hacen contra Cataluña, contra el idioma catalán y contra los catalanes. Me atrevería a decir que quieren borrar, en general, todo hecho diferencial, toda diferencia social, política, económica y nacional existente entre Cataluña y Castilla. No distinguen independentistas de catalanes en general, ¡no!. Y es así porque los catalanes no son buenos españoles. Dicen que defienden exclusivamente a los españoles en Catalunya los cuales, según ellos, están discriminados y perseguidos como en otros tiempos lo estaban los judíos en la Alemania nazi o los negros de Alabama o Mississipi, por ejemplo. Como se puede ver, no importa el grado de fraudulenta  exageración que utilizan siempre que consigan el objetivo que buscan: atacar y aniquilar a Catalunya.

Decir las mentiras del barquero es el martillo que utilizan para remachar el clavo contra los independentistas y la ya inaplazable independencia de Catalunya. Adornadas con insultos, descalificaciones, persecuciones policiales, fiscales, judiciales, financieras, comerciales, administrativas y políticas. Todas ellas convenientemente reforzadas con las mentiras y manipulaciones antes mencionadas que se atreven a publicar y difundir los medios cavernarios y sus lacayos afectos al régimen, aderezadas de filtraciones proporcionadas por las inagotables ratas de alcantarilla del estado.

Como no quiero seguir hablando de toda la mierda que España está utilizando contra Cataluña, lo dejo aquí. Sólo recordar que a más mierda que remuevan más peste harán. Y la única solución que tenemos los catalanes para librarnos del hedor que desprenden es alejarnos muy lejos y rápidamente de todos ellos. Porque a los catalanes nos gusta respirar aire fresco, oler el perfume de la libertad y de la auténtica justicia y dejar de sufrir las violentas tonterías y odios que generan y sienten algunos españoles, ¡cada vez más!, contra Catalunya.... ¡Que resultan ya insoportables!. Desgraciadamente se parecen más a lo que provocó RT Libre des Mille Collides en Ruanda y que acabó con el genocidio de hutus contra los tutsi, o a las limpiezas étnicas que se produjeron en los Balcanes.

¿España?. ¡No!. Algunos se están ganando para su país el nombre de Escanya. Mejor dicho, por lo que han hecho y hacen estos grandes patriotas a su malogrado país, nación y estado. Están estrangulando la democracia, la tolerancia, la justicia, la libertad y están atizando las fobias más asquerosas contra una nación, Cataluña, como nunca se hayan visto antes en muchos años.

¡Todo esto causa pavor!. ¡Todo ello da bastante asco!.