Si dijera que España se halla en fase terminal, que la metástasis se ha extendido hasta el último rincón de sus instituciones, que ha invadido e infestado buena parte de la sociedad y que afecta la propia supervivencia de este mismo estado, alguien me podrá tildar de exagerado, agorero y/o pesimista. Pero no podría tacharme de mentiroso. La corrupción generalizada ha ensuciado a todo y a todos. Incluso las personas honradas y decentes están pringadas, bien sea por su comportamiento inmovilista o bien por taparse inconscientemente los ojos y las narices ante la realidad que están padeciendo, sin hacer nada para evitarlo. ¡Al contrario!. Reafirman cada vez que pueden a los políticos antidemócratas, votan los partidos corrompidos y apoyan los gobiernos que les están fustigando y esclavizando sin ningún tipo de piedad.....
¡Corrupción sin límites, esta es la cuestión!. Afecta desde el Gobierno de España hasta el último funcionario de ADIF, los cuales no se sienten obligados a cumplir los compromisos contraídos con Catalunya -por parte el ministerio de Fomento, por ejemplo-. Pasando por el partido que respalda al ejecutivo, el cual se halla investigado por financiación irregular y corrupción generalizada. Además de estar imputado como asociación creada para delinquir. Continuando el repaso por el primer partido de la oposición y los escándalos multimillonarios andaluces, con implicaciones de los expresidentes de la Comunidad, Chaves y Griñan.... y algunas docenas más de aprovechados. Incluso ahora, que comienzan a surgir denuncias -por ejemplo, el digital Royal Economy UK del once de septiembre de 2016-, que informa de un supuesto fraude electoral, con responsabilidad directa del ínclito Fernández Díaz. ¡La limpieza y pulcritud de las elecciones y el consecuente escrutinio en manos de un reconocido conspirador....!. ¡Madre mía, qué susto!.
¡Pués bién!. Si nos fijamos en qué están haciendo contra el proceso independentista y contra Catalunya, todo se agrava y escampa aún más. Las cuchilladas vienen desde las contaminadas instituciones del Estado, del Gobierno de la Nación y de los partidos nacionalistas españoles, así como también desde los tribunales, fiscales, policía castellanos y desde la caverna mediática españolas, sin solución de continuidad. ¡A diestro y siniestro!. Antes querían "conseguir el efecto sin que se note el cuidado". Ahora ya no les importa conseguir el efecto aunque se note el cuidado.
El ignominioso siniestro del Interior, el inefable Jorge Fernández Díaz continúa demandando a la fiscalía que siga afinando debidamente todo aquello que vaya contra Catalunya, como puede ser el anunciado juicio contra Artur Mas, Irene Rigau, Joana Ortega y Francesc Homs, a la vez que pagó un millón y medio de euros -con dinero público, naturalmente- al chivato que le sirvió la información sobre Xavier Trias y que resultó ser más falsa que un duro sevillano. Este santo varón llamado Jorge ha sido estafado aun siendo conocido como el capo de la operación Catalunya. Él es el máximo responsable de haberse cargado la sanidad pública catalana según consta en la conversación mantenida con el jefe de la oficina anticorrupción (!¡) de Catalunya, o de inspirar las gestiones justas y necesarias para que la fiscalía española afine las imputaciones contra políticos catalanes basadas en informaciones falsas o manipuladas para después filtrarlas a intrépidos periodistas de investigación afectos al régimen de ahora -¡y al franquista de siempre!- a mayor gloria de la sagrada unidad de la patria..... ¡española, se entiende!.
El Gobierno de España, formado por individuos como el tenebroso Fernández Díaz, al lado de nosferatu Montoro -encargado de estrangular las finanzas catalanas-, Margallo -responsable del servicio exterior incluyendo el espacio sideral- o Soraya Sáenz de Santamaría, responsable del servicio de inteligencia -¡las ratas de cloaca!- todos ellos bajo el mando del pasmarote Mariano Rajoy Brey, de profesión registrador de la propiedad en calidad de presidente del gobierno en funciones y comandante en jefe de la Operación Catalunya. Todos ellos se afanan en hacer descarrilar de mala manera el independentismo. Ahora fabrican pruebas falsas y difamatorias contra políticos e instituciones catalanas, o boicotean las inversiones necesarias del corredor Mediterráneo y del puerto de Barcelona. A la vez que retardan transferencias de recursos o cobran intereses abusivos por prestarnos nuestro propio dinero, previamente confiscado vía impuestos. O instan a la justicia castellana para que no permitan que el consejero Romeva o el representante permanente ante la Unión Europea Amadeu Altafaj, hagan su trabajo de asuntos exteriores como representantes de Catalunya ante las instituciones europeas y los gobiernos del resto del Mundo, aduciendo absurdas cuestiones semánticas. Y todo ello adobado por la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría -capitana de la temida y prepotente brigada Aranzadi- con las penosas actuaciones de los agentes del CNI volcados en sabotear el proceso soberanista catalán, por más democrático, legítimo y pacífico que pudiera ser....
Y don Tancredo Rajoy dice que no sabe nada de nada..... No sabe que su partido es una asociación delictiva repleta de vivales; que hay más corruptos que militantes honrados dentro de la cúpula de su partido; que tiene ministros que provocan vergüenza ajena y que en muchos países del Mundo serian firmes candidatos en acabar entre rejas a perpetuidad; que su talante y comportamiento ha infectado a la justicia, la fiscalía, la policía, los medios de comunicación, las altas y bajas instituciones públicas y privadas; que la mierda alcanza al IBEX 35 y al resto de supervivientes del anonadado y abrumado -¡aniquilado!- mundo sindical..... ¡Todo, absolutamente todo huele a podrido!. ¡Y no precisamente en Dinamarca!.
Mientras, pasmarote Rajoy no se entera. ¡No sabe nada de nada!. Pues deberían echarlo afuera, de una puñetera vez!. Como no se da cuenta de la realidad que le rodea.... Con un poco de suerte no notará que ya no es presidente del Gobierno de España..... Porque si no lo hacen, ¡España se va a pique, ya....!.
Antes que esto pase, empero, Catalunya ya tienen que haber conseguido el efecto -la independencia- aunque se note el cuidado -la revuelta, la desobediencia-. Si no queremos acabar tan mal como España.
¡Corrupción sin límites, esta es la cuestión!. Afecta desde el Gobierno de España hasta el último funcionario de ADIF, los cuales no se sienten obligados a cumplir los compromisos contraídos con Catalunya -por parte el ministerio de Fomento, por ejemplo-. Pasando por el partido que respalda al ejecutivo, el cual se halla investigado por financiación irregular y corrupción generalizada. Además de estar imputado como asociación creada para delinquir. Continuando el repaso por el primer partido de la oposición y los escándalos multimillonarios andaluces, con implicaciones de los expresidentes de la Comunidad, Chaves y Griñan.... y algunas docenas más de aprovechados. Incluso ahora, que comienzan a surgir denuncias -por ejemplo, el digital Royal Economy UK del once de septiembre de 2016-, que informa de un supuesto fraude electoral, con responsabilidad directa del ínclito Fernández Díaz. ¡La limpieza y pulcritud de las elecciones y el consecuente escrutinio en manos de un reconocido conspirador....!. ¡Madre mía, qué susto!.
¡Pués bién!. Si nos fijamos en qué están haciendo contra el proceso independentista y contra Catalunya, todo se agrava y escampa aún más. Las cuchilladas vienen desde las contaminadas instituciones del Estado, del Gobierno de la Nación y de los partidos nacionalistas españoles, así como también desde los tribunales, fiscales, policía castellanos y desde la caverna mediática españolas, sin solución de continuidad. ¡A diestro y siniestro!. Antes querían "conseguir el efecto sin que se note el cuidado". Ahora ya no les importa conseguir el efecto aunque se note el cuidado.
El ignominioso siniestro del Interior, el inefable Jorge Fernández Díaz continúa demandando a la fiscalía que siga afinando debidamente todo aquello que vaya contra Catalunya, como puede ser el anunciado juicio contra Artur Mas, Irene Rigau, Joana Ortega y Francesc Homs, a la vez que pagó un millón y medio de euros -con dinero público, naturalmente- al chivato que le sirvió la información sobre Xavier Trias y que resultó ser más falsa que un duro sevillano. Este santo varón llamado Jorge ha sido estafado aun siendo conocido como el capo de la operación Catalunya. Él es el máximo responsable de haberse cargado la sanidad pública catalana según consta en la conversación mantenida con el jefe de la oficina anticorrupción (!¡) de Catalunya, o de inspirar las gestiones justas y necesarias para que la fiscalía española afine las imputaciones contra políticos catalanes basadas en informaciones falsas o manipuladas para después filtrarlas a intrépidos periodistas de investigación afectos al régimen de ahora -¡y al franquista de siempre!- a mayor gloria de la sagrada unidad de la patria..... ¡española, se entiende!.
El Gobierno de España, formado por individuos como el tenebroso Fernández Díaz, al lado de nosferatu Montoro -encargado de estrangular las finanzas catalanas-, Margallo -responsable del servicio exterior incluyendo el espacio sideral- o Soraya Sáenz de Santamaría, responsable del servicio de inteligencia -¡las ratas de cloaca!- todos ellos bajo el mando del pasmarote Mariano Rajoy Brey, de profesión registrador de la propiedad en calidad de presidente del gobierno en funciones y comandante en jefe de la Operación Catalunya. Todos ellos se afanan en hacer descarrilar de mala manera el independentismo. Ahora fabrican pruebas falsas y difamatorias contra políticos e instituciones catalanas, o boicotean las inversiones necesarias del corredor Mediterráneo y del puerto de Barcelona. A la vez que retardan transferencias de recursos o cobran intereses abusivos por prestarnos nuestro propio dinero, previamente confiscado vía impuestos. O instan a la justicia castellana para que no permitan que el consejero Romeva o el representante permanente ante la Unión Europea Amadeu Altafaj, hagan su trabajo de asuntos exteriores como representantes de Catalunya ante las instituciones europeas y los gobiernos del resto del Mundo, aduciendo absurdas cuestiones semánticas. Y todo ello adobado por la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría -capitana de la temida y prepotente brigada Aranzadi- con las penosas actuaciones de los agentes del CNI volcados en sabotear el proceso soberanista catalán, por más democrático, legítimo y pacífico que pudiera ser....
Y don Tancredo Rajoy dice que no sabe nada de nada..... No sabe que su partido es una asociación delictiva repleta de vivales; que hay más corruptos que militantes honrados dentro de la cúpula de su partido; que tiene ministros que provocan vergüenza ajena y que en muchos países del Mundo serian firmes candidatos en acabar entre rejas a perpetuidad; que su talante y comportamiento ha infectado a la justicia, la fiscalía, la policía, los medios de comunicación, las altas y bajas instituciones públicas y privadas; que la mierda alcanza al IBEX 35 y al resto de supervivientes del anonadado y abrumado -¡aniquilado!- mundo sindical..... ¡Todo, absolutamente todo huele a podrido!. ¡Y no precisamente en Dinamarca!.
Mientras, pasmarote Rajoy no se entera. ¡No sabe nada de nada!. Pues deberían echarlo afuera, de una puñetera vez!. Como no se da cuenta de la realidad que le rodea.... Con un poco de suerte no notará que ya no es presidente del Gobierno de España..... Porque si no lo hacen, ¡España se va a pique, ya....!.
Antes que esto pase, empero, Catalunya ya tienen que haber conseguido el efecto -la independencia- aunque se note el cuidado -la revuelta, la desobediencia-. Si no queremos acabar tan mal como España.
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