Nuestros políticos, algo pardillos, han decidido que lo mejor para Catalunya es negociarlo todo con el reeditado -y sustentado por ellos- nuevo gobierno progresista de coalición. Negociar la autodeterminación, la amnistía, la financiación, las infraestructuras..... ¡Todo!. El día a día y el año a año. El pescado, el cesto y el pescador. Y quieren hacernos creer que van a conseguir los acuerdos adecuados y necesarios para hacer realidad nuestros deseos de libertad.
¡Narices!. Se ha creado en todo el Estado la necesaria atmósfera negativa y contraria a la negociación que hará imposible acordar ninguna convocatoria de referèndum de autodeterminación. PPVOX y el ala menos socialista de las izquierdas están realizando una campaña mediática brutal contra este derecho dirigida a condicionar la opinión supuestamente imparcial del Tribunal Constitucional, del Consejo de Estado y todas las demás instituciones españolas, lo cual hará imposible cualquier tipo de consulta sobre el derecho a decidir y se impedirá que traspase la telaraña político-administrativa que han extendido contra ese derecho irrenunciable para los catalanes, al objeto que nunca llegue a implementarse. Aunque se encuentra recogido en la Constitución a través de los acuerdos internacionales suscritos por el Reino de España. En cuanto a la amnistía el CGPJ, el TS, la AN, la fiscalía y la mayoría de asociaciones profesionales de la judicatura y los sindicatos policiales ya se han posicionado frontalmente en contra y amenazan con elevar consultas dilatorias al TC y a la justicia europea para torpedear la futura aplicación de la ley -si es que finalmente se aprueba- y por tanto, manteniendo la persecución política y de toda índole contra el independentismo como si aquí no hubiera pasado nada.
La financiación también ha merecido las diatribas del PPVOX y las reservas del socialismo. ¡No a una financiación singular para Cataluña!. El resto de autonomías han hecho todos los aspavientos habidos y por haber para que esto no signifique que Cataluña reciba más recursos para evitar agravios comparativos, salvo el expolio fiscal que sufre Cataluña, claro está. En definitiva no a disminuir el déficit fiscal ya que ello iría en contra del superávit del resto de autonomías.... ¡No, no, no!. Aun gracias que ofrecen disminuir la deuda acumulada en 15.000 millones de euros en Cataluña, eso sí, extendiendo esta gracia al resto de autonomías en las cantidades equivalentes para cada una de ellas. Aunque lo siguen criticando ferozmente puesto toca más quita para Cataluña -la más endeudada- y ¡eso no se puede tolerar!. El gobierno también se han comprometido, como siempre, que este modelo de financiación será el mejor que nunca se haya aprobado y que beneficiará a todo el mundo por igual, singularmente a Cataluña.....
En lo que respecta a infraestructuras lo que siempre. Promesas, compromisos y ejecuciones presupuestarias que nunca acabarán cumpliéndose.
No sacaremos nada de fiarlo todo a la negociación con quien no quiere negociar lealmente. Tenemos la experiencia acumulada en los últimos casi 50 años de presunta democracia española. Está llena de frustraciones, engaños, mentiras e incumplimientos. España no es de fiar porque no quiere -¡no nos quiere!- a los catalanes. ¡Quiere súbditos!. ¡Somos un estorbo para ellos!. Por eso quieren aniquilarnos como nación, como pueblo y como ciudadanos.
Así pues, ¿qué debemos hacer? ¿Qué puede hacer la Generalitat? Y el pueblo, ¿qué queremos y qué haremos?.
SIGUE.....
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