Quedan tantas cosas por decir y escribir..... ¡Aunque no sé por dónde empezar!.
¿Empezamos por la aprobación de la ley del referéndum y el filibusterismo empleado por los grupos parlamentarios unionistas, empeñados en impedirlo?. ¿Por la abusiva e ilegítima detención de unos quince altos cargos y empleados públicos vinculados en la organización de la consulta?. ¿Por el vergonzoso espectáculo que las fuerzas de ocupación españolas ofrecieron buscando urnas, papeletas y sobres, asediando empresas y sedes de partidos políticos y haciendo registros domiciliarios sin mandato judicial?. ¿O por la brutalidad que las fuerzas españolas emplearon contra miles de ciudadanos -setecientos mil no pudieron votar por la actuación de la policía y Guardia Civil- que pacíficamente exigimos poder ejercer nuestros derechos?. ¿O tal vez puedo comenzar por la escandalosa estigmatización y persecución hecha por la policía y Guardia Civil españoles, así como por la fiscalía y la Audiencia Nacional, los cuales se han ensañado contra los Mossos d'Esquadra y el Mayor Trapero, y con los presidentes de Òmnium -Jordi Cuixart- y de la ANC -Jordi Sànchez-, acusándolos de sediciosos porque a pesar de los abruptos esfuerzos desplegados por el unionismo, malogrados y contundentes a la vez, todo acabó saliendo como quería el independentismo y no como querían los nacionalistas españoles....?.
Lo que ha pasado estos días en solo el prólogo de lo que puede pasar de ahora en adelante puesto que el Estado español tiene muy mal perder. Y todo parece indicar que ya han perdido, incluso antes que Catalunya sea plenamente independiente y soberana. De manera que el odio acumulado y la sed de venganza dominarán su comportamiento en el porvenir.....
Ciertamente, el independentismo ha ganado tanto el relato dentro de Catalunya como afuera, en el extranjero. En Catalunya y en el resto de Mundo, la movilización de millones de catalanes defendiendo pacíficamente nuestros derechos civiles ante la violencia desplegada por el Estado, ha servido para constatar que una papeleta y una urna siempre ganan a la barbarie y el encarnizamiento, por más que las ejerzan fuerzas represivas supuestamente dirigidas por el poder político de un Estado débil pero peligroso, el cual a la vez se ha revelado prepotente y desaforado.....
Esta debilidad española es lo que más nos debería inquietar a todos los ciudadanos puesto que son capaces de hacer cualquier cosa para ganar el envite, lo llaman desafío secesionista, que Catalunya ha planteado desde -¡no se olvide!- hace más de siete años. La vergonzosa actuación del Partido Popular ante la aprobación del Estatuto convenientemente cepillado por las Cortes y refrendado por el pueblo catalán, así como la recogida de firmas en toda España contra este propio estatuto -¡contra Catalunya, en realidad!- y la posterior impugnación ante un Tribunal Constitucional ilegítimo -fue vergonzosamente manipulado por los populares-, dan suficientes pistas de lo que son capaces de hacer en defensa de los intereses del nacional-catolicismo imperante y siempre vivo en la España inmemorial y eterna, que tanto gusta a los conservadores derechones y a los jacobinos supuestamente de izquierdas, que reparten las cartas españolas desde siempre, por la gracia de Dios.....
¿Empezamos por la aprobación de la ley del referéndum y el filibusterismo empleado por los grupos parlamentarios unionistas, empeñados en impedirlo?. ¿Por la abusiva e ilegítima detención de unos quince altos cargos y empleados públicos vinculados en la organización de la consulta?. ¿Por el vergonzoso espectáculo que las fuerzas de ocupación españolas ofrecieron buscando urnas, papeletas y sobres, asediando empresas y sedes de partidos políticos y haciendo registros domiciliarios sin mandato judicial?. ¿O por la brutalidad que las fuerzas españolas emplearon contra miles de ciudadanos -setecientos mil no pudieron votar por la actuación de la policía y Guardia Civil- que pacíficamente exigimos poder ejercer nuestros derechos?. ¿O tal vez puedo comenzar por la escandalosa estigmatización y persecución hecha por la policía y Guardia Civil españoles, así como por la fiscalía y la Audiencia Nacional, los cuales se han ensañado contra los Mossos d'Esquadra y el Mayor Trapero, y con los presidentes de Òmnium -Jordi Cuixart- y de la ANC -Jordi Sànchez-, acusándolos de sediciosos porque a pesar de los abruptos esfuerzos desplegados por el unionismo, malogrados y contundentes a la vez, todo acabó saliendo como quería el independentismo y no como querían los nacionalistas españoles....?.
Lo que ha pasado estos días en solo el prólogo de lo que puede pasar de ahora en adelante puesto que el Estado español tiene muy mal perder. Y todo parece indicar que ya han perdido, incluso antes que Catalunya sea plenamente independiente y soberana. De manera que el odio acumulado y la sed de venganza dominarán su comportamiento en el porvenir.....
Ciertamente, el independentismo ha ganado tanto el relato dentro de Catalunya como afuera, en el extranjero. En Catalunya y en el resto de Mundo, la movilización de millones de catalanes defendiendo pacíficamente nuestros derechos civiles ante la violencia desplegada por el Estado, ha servido para constatar que una papeleta y una urna siempre ganan a la barbarie y el encarnizamiento, por más que las ejerzan fuerzas represivas supuestamente dirigidas por el poder político de un Estado débil pero peligroso, el cual a la vez se ha revelado prepotente y desaforado.....
Esta debilidad española es lo que más nos debería inquietar a todos los ciudadanos puesto que son capaces de hacer cualquier cosa para ganar el envite, lo llaman desafío secesionista, que Catalunya ha planteado desde -¡no se olvide!- hace más de siete años. La vergonzosa actuación del Partido Popular ante la aprobación del Estatuto convenientemente cepillado por las Cortes y refrendado por el pueblo catalán, así como la recogida de firmas en toda España contra este propio estatuto -¡contra Catalunya, en realidad!- y la posterior impugnación ante un Tribunal Constitucional ilegítimo -fue vergonzosamente manipulado por los populares-, dan suficientes pistas de lo que son capaces de hacer en defensa de los intereses del nacional-catolicismo imperante y siempre vivo en la España inmemorial y eterna, que tanto gusta a los conservadores derechones y a los jacobinos supuestamente de izquierdas, que reparten las cartas españolas desde siempre, por la gracia de Dios.....
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