Hoy no pienso hablar sólo de los partidos independentistas porque no hacen lo que deberían hacer, ni tampoco de la independencia de Catalunya o de los catalanes, aturdidos como estamos por el triste espectáculo madrileño que quieras o no, cabe decirlo, forzosamente vivimos. ¡No!. Hoy pienso hablar sobre todo de la toxicidad política que señorea por el reino de España, aunque me resultará difícil no conectar esta toxicidad con el anticatalanismo que acoge tan profusamente desde siempre el estado borbónico castellano.
Encontramos un ejemplo paradigmático en la presidenta de la Comunidad de Madrid. Tiene un comportamiento hacia lo que ella considera debe ser el ejercicio del poder, hoy por hoy como líder de la comunidad, bastante extremista. Diría de extrema derecha porque a menudo se inspira en el partido franquista VOX. Es decir, Ayuso comulga a menudo con las prácticas franquistas, que significa fascistas. Es por eso que ahora carga abruptamente contra la esposa de Pedro Sánchez y una supuesta corrupción de él mismo y de su entorno, o pregona el retorno de una exitosa ETA, utilizando tanto como le place las víctimas de los terroristas y la memoria de los asesinados. O bien se llena la boca despotricando, mintiendo y exagerando -todo a la vez- sobre los independentistas y contra Cataluña y los catalanes en general, haciéndolo como si no existiéramos y por tanto no escuchemos las sandeces que se atreve a decir contra los independentistas, mayoritarios aún hoy en Cataluña.
¿Por qué hace todo ello? Pues para esconder la corrupción confesa de su actual compañero de cama y al mismo tiempo hacerle la cama a su teórico compañero y líder del PPVOX, Alberto Nuñez Feijoo, para echarlo y ocupar su poltrona y poder así atosigar aún más encarnizadamente a Pedro Sánchez y al gobierno más progresista de la historia mundial, que ella considera es una catástrofe para su amada y sesgada España unicolor y uniforme, absolutamente madridlizada. Y como Feijoo siente como resopla en su nuca, se le eriza el pelo a la vez que un escalofrío mortal recorre toda su persona, asume sin tapujos la política de tierra quemada contra el gobierno, contra Sánchez y su mujer y contra cualquier cosa que se interponga entre su frustración política y su enemigo político, que él considera está ocupando el lugar que la historia y los dioses -no los votos- tienen reservado para Alberto Nuñez Feijoo.
Estos dos personajes de la ultraderecha madrileña y el resto de compañeros de la ejecutiva de la secta derechona y nacionalista española han contagiado su toxicidad al partido del que todos ellos penden, dependen y manipulan. Lo cual ha hecho del PPVOX una formación altamente tóxica y, por qué no decirlo, peligrosamente antidemocrática. Pero esto no es todo.....
Puesto que esta toxicidad política se ha esparcido como la metástasis de un cáncer ocasionando que casi todas las instituciones del estado la sufran. Jueces y magistrados, fiscales y policías, políticos, periodistas, empresarios.... Ninguna institución española se libra de esta lacra. ¡Ha contaminado todo lo que se conoce como Madrit, ombligo del mundo!.
Cuando se politiza la justicia, se judicializa la política, cuando la policía se convierte en patriótica, la prensa se vuelve sectaria y los empresarios basan sus decisiones no en los intereses empresariales y económicos sino en sus manías y preferencias políticas, el resultado es un desbarajuste desastroso para todas estas instituciones empapadas por la toxicidad política del Madrit inmemorial.
Madrit está haciendo de España un producto altamente tóxico, antipático y en acelerada descomposición que se precipita imparablemente hacia la estrepitosa y definitiva quiebra como estado, como país y como nación, si no lo corrigen los votos. O los dioses, puesto que es bastante difícil que se arregle con la frágil democracia española.
Por todo ello me pregunto: ¿Por qué narices los catalanes no hacemos mutis por el foro y ponemos pies el polvorosa de este estado en precipitada quiebra?. ¿Por qué los partidos independentistas no pactan y defienden una hoja de ruta unitaria hacia la independencia?.¿Porque nosotros los ciudadanos independentistas no forzamos a partidos, instituciones y el resto de compatriotas escépticos y volvemos a ocupar las calles exigiendo ya la independencia de una maldita vez?. ¡Es que no lo entiendo!.
¡Collons!. Que nos estamos jugando la supervivencia.....
